martes, 19 de abril de 2016

HABLAMOS DE VELAS: LIMPIAR Y RITUALIZAR VELAS



Recomendaciones:

Como advertencia general conviene no pedir más de lo que se necesita, ni más de lo que se puede devolver, puesto que todo aquello que es concedido tiene su contrapartida, es decir, debe devolverse el favor en reciprocidad y agradecimiento.


La utilización de las velas no es un juego, sino que responde a un protocolo determinado del que no conviene abusar. Recurrir sistemáticamente al uso de las velas como medio para pedir que se solucionen los problemas sin que el propio individuo actúe para solventados sólo puede llegar a crear una insana dependencia. La magia ayuda sólo a quienes se esfuerzan por sí mismos en alcanzar unos objetivos.




Por este motivo, antes de empezar conviene saber qué se desea, cómo debe pedirse, por qué y para quién -puesto que se puede pedir para uno mismo o para otra u otras personas, y, en caso de que se pida para otra u otras personas, debe contarse con el consentimiento de estas. Este último dato es importante: si no se cuenta con la aprobación de quienes han de beneficiarse de las peticiones que se van a realizar, es mejor no iniciar el ritual puesto que este sería inútil e incluso podría volverse en contra de quien lo practica.


Hay que tener presente que la vela puede servir como elemento de adivinación, como medio para curar a un enfermo, para pedir protección, como expresión de deseo de bienestar o simplemente como guía espiritual y ayuda en la propia meditación. Se recomienda que para practicar el ritual se disponga de una habitación o de un lugar específico que reúna unas determinadas condiciones. Preferiblemente, debería desarrollarse en un habitáculo privado, aislado del entorno, puesto que así se facilita la capacidad de concentración del oficiante, el poder magnético fluye con facilidad y el ritual gana en efectividad.


Así mismo, una de las recomendaciones que conviene seguir para llevar a cabo la práctica del ritual es la utilización de elementos que sirvan para reforzar el efecto del trabajo. se pueden utilizar determinadas piedras, plantas, aceites, perfumes y oraciones. En lo que a perfumes se refiere, la utilización del incienso es una de las más recomendadas. La vela antes de ser utilizada, ha se ser sanada y ritualizada con el aceite adecuado a cada caso y darle las gracias por el trabajo que va ha realizar.


Para ello limpiaremos nuestras manos y las untaremos con el aceite que queremos utilizar, veremos mas adelante algunos aceites y sus usos, pero si tenemos dudas, o no sabemos cual utilizar en el ritual que vamos a llevar a cabo, el aceite de oliva virgen es el más adecuado, siempre podemos ungir la vela con este aceite. Con nuestras manos comenzamos a frotar la vela de la base a la mecha si nuestra petición es para que algo crezca, o al revés si nuestra petición es para aminorar algo; yo utilizo las siguientes palabras mientras estoy limpiando con mis manos la vela, pero cada uno podéis según vuestras creencias o gusto crear una oración similar donde pongáis toda vuestra intención.


“Vela con esta aceite te voy limpiando, porque mis manos canalizan la energía del universo, para que te pueda limpiar y ritualizar, así pues quedas limpia y ritualizada, ahora haz para mi tu trabajo en este ritual. Gracias”


Conviene también recordar que sólo debe usarse una vela por cada uno de los ritos que se celebren.


Precisamente la última recomendación trata del encendido de la vela. Como se ha dicho anteriormente, se recomienda que este se realice con una cerilla (preferiblemente de madera), con otra vela, con varillas o papeles preparados para este fin y no con un encendedor.


Una vez que se hayan seguido todas estas recomendaciones, aquellas personas que lo deseen estarán preparadas para iniciar el rito.


Vuestro deseo o petición hacedla mientras encendéis la vela en voz alta, podéis escribirla y leerla, y dejarla al lado de la vela mientras esta se consume; pero sobre todo poned toda vuestra intención y amor en ello.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

amazon

“El que siembra un pensamiento, cosecha una acción,

el que siembra una acción, cosecha un hábito,

el que siembra un hábito, cosecha un carácter,

el que siembra un carácter, cosecha un destino.”

Lo más leido